Hace tiempo que quería escribir sobre esto, pero he buscado por internet y en libros y no he encontrado casi nada.
El Ayuntamiento de Pamplona tiene un proyecto que se llama “Pacto por la conciliación de la vida personal, laboral y familiar de hombres y mujeres”.
Yo he participado recibiendo clases de fontanería, bricolaje y electricidad. Y he impartido clases de alimentación sana, confección de menús y cuidado de la ropa.
Gracias a Dios las mentalidades van cambiando. La mujer-madre, que hasta hace pocos años, sólo atendía a su familia, puede aportar mucho en otros ámbitos de la sociedad. Y el hombre-padre, que se ocupaba poco o nada de las tareas de la casa, también puede aportar mucho en este ámbito.
Todas las profesiones que Chesterton atribuía a las mujeres y que publiqué en una entrada titulada “Las profesiones de una madre”, se pueden aplicar también a los padres. También ellos son decoradores, cuentacuentos, expertos en cocina, ministros de economía, enfermeros…
La cuestión está en ponerse de acuerdo y repartir tareas, para que no esté uno más sobrecargado que el otro.
Y en el terreno afectivo, decía una revista que llegó hace tiempo a mis manos que los hombres tienen unas cualidades que hace que sean insustituibles como padres:
- Hacen capaces a los hijos, mientras que las madres tienen una tendencia innata a protegerles.
- Suelen ser más francos y directos en las conversaciones.
- No se adelantan a las necesidades de los hijos.
- Aceptan los defectos de los hijos.
- Son clave en la transmisión de valores y en las creencias religiosas
- Propician la independencia del hijo…
Es verdad que son generalidades que no siempre responden a la realidad. Pero lo que está claro es que padres y madres se tienen que ocupar de la educación de los hijos y de las tareas del hogar.
!Buenísimo ! esto le va a gustar mucho a tu hermano y cuñado, pero se te olvidó poner el gran papel de tíos solteros que tanto ayudan y acompañan a los sobrinos, en nuestra familia hay alguno.